La casa de un hombre en Estados Unidos fue completamente destruida y hecha pedazos después de que un desconocido publicara un anuncio falso en el sitio Craiglist diciendo que todo en su propiedad era completamente gratis y que cualquiera que se acercara a la casa podía tomar lo que quisiera mientras él estaba de vacaciones.
George Stanley del pueblo Greene en el estado de Maine estaba completamente en shock cuando regresó a su propiedad después de unas vacaciones de dos semanas en Florida y encontró su casa destrozada y convertida en trizas.
El señor de 71 años de edad encontró las puertas destruidas, los generadores de luz aplastados, su trailer completamente roto, perdió sus herramientas de trabajo e incluso sus arboles y arbustos fueron arrancados de la tierra. Dentro de la casa los pisos estaban completamente sucios, llenos de mugre y bolsas de basuras y pedazos rotos de sus muebles.
Según George, todas las perdidas simbolizan un valor de 10.000 dolares y no comprende la situación, pues ningún vecino lo alertó de lo que sucedía en su casa, la cual le tomó 11 años construir y decorar a su gusto con piezas de arte que el mismo había creado y ahora están completamente destrozadas.
Aunque el anuncio ya fue eliminado de la página norteamericana, fue publicado por 3 días donde decía que todo lo de la propiedad era gratis. La policía estatal de Maine está investigando sobre la publicación que dejó al señor prácticamente en la calle.
George Stanley vivía completamente solo en su propiedad que tenía un increíble valor sentimental para él, pues no tiene ni hijos ni esposa.
Los vecinos informaron a la policía que vieron como la gente no dejaba de llegar todo el día a la propiedad para llevarse lo que pudieran encontrar, sin importarles los carteles que decían “No pase”. Incluso afirman que hubo hasta 6 carros estacionados frente a la propiedad para llevarse todo lo que pudieran.
Lo más triste del caso es que George, el propietario de la casa fue diagnosticado con cáncer a principios de este año y cree que no tiene muchos años más de vida, por lo que construyó un cuarto llamado “El cuarto sanador de cáncer”, el cual fue completamente destrozado también, donde se reunía con otras victimas de cáncer para conversar y tener sesiones de relajación.
El señor Stanley dijo que algunos vecinos han sido muy amables con él, pero a otros nos le ha importado para nada su situación, pues en el pasado, había tenido discusiones con algunos de ellos por el desorden que generaba su casa en el barrio.
“Estaré aquí, en medio de la nieve, tratando de acomodar todo y devolver el orden a mi hogar” dijo George.